José Ángel G.C. de Granja de Rocamora (Alicante)
Lo poco que puedo decir de Rebeca es agradable, yo fui compañero durante la E.G.B., siempre la he conocido como una chica muy normal, constantemente ha llevado su enfermedad en silencio, es una de tantas cosas que yo admiraba de ella, el tiempo que la he conocido os puedo decir que era una persona de su casa y familia, como también muy creyente.
Después de la E.G.B. perdí el trato con ella, por causa de los estudios y porque salía muy poco. Unos meses antes de caer enferma, quedamos todos los compañeros de E.G.B. en juntarnos un sábado para cenar juntos y salir un rato, y os puedo contar que no habíamos ninguno tan entusiasmados como pudo estar ella. Fue una noche agradable, porque estábamos personas que desde la E.G.B. no nos habíamos reunido, como en el caso de Rebeca, por eso fue una de las más felices de todos los que estábamos allí.
Después de esta cena, ya no la vi hasta que me enteré que estaba enferma, y sin pensarlo dos veces, fui a verla con dos amigos más, nuestra impresión al verla en la cama en el estado que estaba fue muy triste, pensar que una persona, con la juventud que tenía, podía estar así, pero eso no fue todo, lo increíble fue la voluntad que salía de ella para ponerse bien y las ganas que tenía de reunirnos otra vez para poder cenar todos los compañeros unidos.
José Ángel G.C. (Granja de Rocamora -Alicante-)