Ha fallecido Óscar Rocamora Ramón, padre de Rebeca
El martes 11 de diciembre ha fallecido Francisco Óscar Rocamora Ramón a los 69 años de edad, padre de nuestra joven Sierva de Dios Rebeca, tras una enfermedad que lo mantuvo en cama los últimos meses. Un tiempo en que se ha afianzado todavía más su buen hacer como persona y su gran ejemplo como cristiano para todos los que le conocieron. Hombre de profunda fe, ha aceptado la voluntad de Dios de un modo extraordinario en cada uno de los momentos de su vida y ha dejado a su alrededor, especialmente a su familia, un inmenso legado de amor.
Su muerte ha sido el vivo recuerdo de la de su hija Rebeca, que le habrá recibido con inmensa alegría en el Cielo. Un padre digno de tal hija y una hija digna de tal padre. Su funeral, repleto de gente que lo apreciaba y quería, fue celebrado por 9 sacerdotes y un canto a Cristo Resucitado, acompañado por toda su familia, amigos y los costaleros y cofrades de la Cofradía del Santo Sepulcro de Granja de Rocamora, de la que Óscar era presidente. Gracias por tanto amor como nos has dejado y de seguro seguirás dándonos ahora.
Agradecemos desde aquí las muestras de condolencia de tantísimas personas y compartimos con todos, algunos de los mensajes que nos han llegado:
“Hoy, la Hermandad esta triste ha fallecido nuestro amigo Óscar, el cual pertenecía a la Hermandad y fue uno, junto con otras personas, de los promotores de dicha Hermandad. Óscar, esperamos que desde el cielo y junto con tu hija Rebeca nos echaras una mano, o las dos. Cuenta con nuestra oración”.
“Hace tiempo nos conocimos y siempre has sido una persona buena, llena de fe y espiritualidad. He admirado tu capacidad de lucha y entrega por los demás: por tu familia, tus amigos, tus vecinos, tu larga enfermedad. No te dabas por vencido y siempre veías el lado positivo de lo que te pasaba. Doy gracias por haber conocido a tu familia -de la cual me siento una pequeña parte aún sin serlo-, ejemplo de vida llena de fe, gran espiritualidad y entrega a los demás. Ahora ya estás allí arriba con tu Rebeca y parte de los míos que son también amigos tuyos. No dejes de posar esa tierna mirada de ojos azules llenos de ternura y paz en Mari Rosi y en tus hijas, acompáñalas desde lo alto como has hecho siempre. Gracias Óscar por tu ejemplo, hasta siempre”.
“Por suerte he podido estar presente con mi tío. Ahora sé que estás en el cielo y serás el ángel de la guarda de mi Raúl. Me enorgullece haber visto a mis primas y a mi tía tan cerca de su ser querido. El ser querido de todo un pueblo, toda una cofradía, toda una familia. Siempre estarás presente en todos los granjeros y una parte de Murcia. Te amo tío Óscar. Hasta siempre”.
“Otro santo más para el cielo, ojalá yo pudiera presentarme ante el Padre como él lo habrá hecho. Es triste para la familia, muy triste, pero cristianamente hablando, un gozo el saber que se ha ido tan santamente, algo tan extraordinario en los tiempos que estamos viviendo. Que Dios bendiga a esta familia que tanto nos ha dado”.