Expresiones de algunos niños de catequesis tras la muerte de Rebeca
-No era mala, ni gritaba ni se enfadaba.
-Salíamos a cantar en Navidad y a sembrar estrellas, pero no quería que tomásemos dinero.
-Nos decía que teníamos que intentar ir a misa y rezar el Padrenuestro.
-Contaba hasta tres cuando nos portábamos mal.
-Saludaba a todo el mundo.
-Nos decía que teníamos que estudiar.
-Nos enseñaba hasta que aprendíamos.
-En mi comunión, yo no estaba muy atento, pero cuando la miraba siempre estaba sonriendo.
-Siempre estaba alegre.
-Cuando ya no nos daba catequesis, nos saludaba y nos preguntaba cómo nos iba. “Estudia y reza todas las noches”, nos decía.
-Nos decía que teníamos que ayudar a la gente mayor a cruzar las calles, a llevarles la compra, tener caridad con los pobres.
-Nos decía que teníamos que santiguarnos y rezar las tres avemarías.
-Era buena tutora y nos decía, cuando nos peleábamos que nos tranquilizáramos o nos castigaba. Pero nunca nos castigaba. Si toda la gente fuera así, no habría guerra.
-Nos decía que teníamos que ayudar a nuestras madres, dar gracias a Dios por lo que teníamos.